26 de agosto de 2019

Se cierra un ciclo para abrir otro nuevo...

Después de 12 años trabajando en la Región de Murcia y los últimos 8 concretamente en el CEIP Giner de los Ríos de Yecla, llegó el momento de decir adiós.
Cambio de colegio y de comunidad y, por fin, puedo desarrollar mi pasión como maestra de Infantil en el pueblo en el que vivo: Almansa.

 Creo que los CAMBIOS son necesarios en la vida y que debemos cerrar ciclos para que se abran mil puertas nuevas...
Han sido unos años llenos de proyectos, ilusión y emoción, en los que he podido aprender, desaprender y crecer como maestra. Y en los que, a pesar de todo, he sido muy feliz.
Me quedo con lo bueno, que ha sido mucho.  Y sobre todo me quedo con las PERSONAS tan geniales que se han cruzado en mi camino: alumnos/as, familias, compañeros/as...

El GINER tendrá un hueco muy grande en mi corazón para siempre. A los que estuvieron y a los que han estado:
un placer coincidir en esta Vida.

 Quiero agradecer especialmente, de corazón, a las FAMILIAS que habéis confiado en mí y en mi trabajo, que sé que son muchas, porque así me lo habéis demostrado con vuestro respeto y vuestro cariño. Muchísimas gracias por vuestro apoyo incondicional, vuestra implicación y colaboración. Habéis sido un pilar fundamental en estos años. 

Una muestra de ello, que me ha emocionado mucho, son la gran cantidad de mensajes que recibí desde que se supo que me marcharía del cole... públicos, privados, orales, escritos, incluso por carta.

Una de las grandes sorpresas de esta despedida me la llevé al abrir la revista del colegio y encontrarme este artículo, que, una mamá ya me había dedicado en la Fiesta de Despedida de Infantil:

Si queréis leerlo mejor, podéis verlo directamente en la revista:



También me gustaría compartir algunos de estos mensajes públicos:



Gracias de todo corazón.
De vez en cuando vuelvo a leerlos todos para volver a emocionarme una y otra vez... Me habéis hecho sentir especial y creer, con más fuerza, en mi trabajo como maestra.

Y qué decir de mis COMPAÑERAS...
esas infantilicas de las que tanto he aprendido en estos años, con las que he compartido momento únicos, que me han seguido en muchas de mis "locuras" y que me han llevado por el camino de muchas otras...😉Lo hemos dado todo, o al menos lo hemos intentado, por y para los niños y niñas.
 Gracias a TODAS; ojalá encuentre muchas profesionales y compañeras como vosotras por el camino.


  Y a todos mis niños y niñas, deciros, como ya hice en su momento, que he sido muy afortunada y estoy muy ORGULLOSA  de haber sido vuestra maestra y que, aunque nos despedimos, ya sabéis que siempre estaremos conectados. Porque, como cuenta una antigua leyenda japonesa que hemos conocido, un hilo rojo invisible conecta a aquellos que están destinados a encontrarse, sin importar el tiempo, el lugar o las circunstancias. El hilo rojo se puede estirar, contraer o enredar, pero nunca se puede romper. Y nosotros estaremos conectados ya por siempre con ese hilo rojo. Nunca nos olvidaremos.


Ahora toca emprender una nueva aventura en un nuevo lugar.
Esta vez, en el CEIP José LLoret Talens.
Voy con la mochila llena de ilusión y de sueños, dispuesta a intentar tocar el corazón de mis alumnos/as y convertirlos en verdaderos protagonistas de su aprendizaje
¡Vamos a pintar un CURSO MÁGICO!


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2 comentarios:

  1. Gracias Elena por tu agradecimiento, la verdad que ha sido todo un placer cruzarnos en esta vida! Mis hijas y yo siempre te tendremos presente en nuestro corazón. Mucha suerte en tu nuevo cole. Un abrazo

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    Respuestas
    1. Muchísimas gracias a ti, por tus palabras y tu apoyo. Siempre llevaré a esas niñas en mi corazón!! Un besazo!

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